27 Ene El seguro de autos “acierto o error”.
Todos hemos visto u oído alguno de los anuncios en los que nos ofrecen mejorar el precio de renovación de nuestro seguro de autos o regalarnos un segundo seguro o hacernos razonar por qué pagar más en lugar de menos. Estas campañas ofrecen seguros de autos muy económicos, cada vez más baratos y más y más. ¿Hasta donde se puede llegar? ¿Cuál es el límite? ¿Cómo es posible que no exista ningún organismo en nuestro país que regule este tema? ¿Tendría que existir una tarifa mínima como ocurre en otros sectores?
Son muchas las dudar que nos surgen a los que trabajamos en la mediación de seguros. El módulos (cantidad fija que paga la entidad culpable de un accidente a la otra) está sobre los 1.000 € y vemos primas en el mercado de seguro de autos a 200 € . No hay que ser especialista en ciencias exactas para ver que la diferencia es demasiada y el riesgo que corren las entidades excesivo.
Lo peor es que se crea en la opinión pública la creencia de que el seguro de autos es algo barato y dar marcha atrás en este sentido es complicado. El seguro no es ninguna frivolidad ni algo que se compra por capricho, el seguro, como indica la introducción del anteproyecto de Ley de Contrato de Seguro cumple un papel fundamental en nuestra sociedad como es el de asegurar la estabilidad patrimonial de los ciudadanos frente a los riesgos que amenazan con su merma o, incluso, su desaparición. Bonitas palabra pero carentes de sentido en este mercado agresivo y sin escrúpulos que existen sobre todo en el ramo de autos.