La vivienda es en muchos casos la mayor inversión que un particular realiza en su vida y es por esto un bien que requiere estar asegurado.
Cuando la vivienda está hipotecada , este seguro es imprescindible ya que la mayor parte de entidades de crédito lo exigen a la hora de formalizar la hipoteca, debiendo quedar muy claro que el cliente tiene la libertad de elegir la entidad aseguradora con la que quiera formalizar el contrato , siempre que se estipule una cláusula de cesión de derechos a favor de la entidad que concede el crédito.
Las compañías de seguros pueden ofrecernos bajo una única póliza coberturas de distintos riesgos, que pueden ir desde los propios que afectan a la vivienda (como incendio, inundación, robo, etc) hasta la cobertura de riesgos personales como la responsabilidad civil ante terceros o la asistencia en viaje.
La mayor parte de las entidades cuenta con servicios de asistencia en el hogar lo que supone una ventaja adicional a la hora de un siniestro. La entidad se encarga de enviar al profesional correspondiente para reparar los daños sin coste para el asegurado.
El seguro de hogar es un seguro con una amplia gama de coberturas a muy buen precio.